La mujer trabajadora.

Des de Canals ens ha arribat aquest text d'una dona duns cincuanta-i-tants anys, la qual té un gran talent literari.

Encara que el dia de la dona treballadora ja ha passat, pensem que qualssevol dia pot ser bó per a retre este xicotet homenatge.


Ser mujer y trabajadora es inevitable. Las mujeres siempre trabajan tanto fuera como dentro de casa, así ha sido, es y será.
Hace 40 años el trabajo fuera del hogar era más bien minoritario, pues las chicas al casarse generalmente dejaban el trabajo en la fábrica o taller para atender el hogar y los hijos. Todas las labores eran manuales: lavar la ropa, llevar a los niños a la escuela etc.
El trabajo fuera de casa era más bien estacional: la fresa, la cebolla, la aceituna, naranja tanto en el campo como en el almacén las mujeres trabajaban diariamente para sacar un dinero que venia bien en la economía familiar, a menudo muy necesario por que no siempre el jornal era seguro en la casa.
Las chicas empezaban a trabajar a los 14 años. A las fábricas textiles de Canals venían muchas de los pueblos de alrededor. Primero en bicicletas, después en autobuses de la Canal y la Costera. Como bandadas de gorriones al despertar el día llegaban a trabajar. Las que vivían en Canals tenían la suerte de hora y media más. A las 5 de la mañana todas al tajo a sacarse el “tope”.
Muchas de las fábricas eran familiares. Tenían de 4 a 20 personas, algunas tenían
Seguridad Social, otras no. Las que estaban en fábricas grandes eran las más afortunadas, pues en éstas los derechos sociales eran mayores.
Las chicas no solían estudiar, ya que las economías no eran lo suficientemente boyantes para permitirlo. Solo aquellas cuyos padres podían pagarlo estudiaban. Muchas que valían para estudiar por circunstancias solo hicieron la enseñanza obligatoria. Para las que ahora tienen alrededor de 30 años las cosas son distintas; los estudios medios o superiores les han permitido ocupar puestos de trabajo muy diferentes de los de sus madres y abuelos. Hoy hay muchos profesoras, abogadas, médicos, enfermeras etc. Afortunadamente para todos en la sociedad de hoy la mujer está en casi todas las profesiones. Las jóvenes de hoy que estudian en la capital, cuando bajan del tren un viernes por la tarde con sus maletas y mochilas me recuerdan a sus madres, parecen las mismas bandadas de gorriones alegres y juguetones. Como sus madres o abuelas estas estudiantes también son mujeres trabajadoras, ellas son el futuro.
Las abuelas se merecen mención especial; los niños pequeños van al colegio o guardería de la mano de ellas. Las madres trabajan fuera de casa a veces fuera del pueblo, los horarios laborales son difíciles de compaginar con el horario escolar y el trabajo es importantísimo.
Las abuelas están criando por segunda vez algo que hay que valorar y agradecerles infinitamente. ¿Quién mejor que tu madre para cuidar de tu hijo?
Todos los días del año son el día de la mujer trabajadora sea cual sea su edad. La jubilación no existe mientras el cuerpo aguante.
Ser mujer y ser mujer trabajadora es lo mismo.


Pilar Yanini.